La decisión del presidente Donald Trump de imponer un arancel del 50% a las importaciones brasileñas, anunciada el 9 de julio de 2025, buscaba presionar a Brasil para frenar el juicio contra Jair Bolsonaro, aliado de Trump. Sin embargo, esta medida ha fortalecido políticamente al presidente Luiz Inácio Lula da Silva, impulsando su popularidad y apoyo en el Congreso. En consecuencia, los aranceles han generado una ola de indignación nacional, consolidando a Lula como defensor de la soberanía brasileña. Por lo tanto, lo que parecía una ventaja para Bolsonaro se ha convertido en un revés para él y un impulso para Lula.
Indignación nacional por los aranceles
Trump justificó los aranceles como respuesta a lo que llamó una “caza de brujas” contra Bolsonaro, acusado de intentar un golpe tras perder las elecciones de 2022. Por su parte, Lula respondió que Brasil no aceptará “chantaje inaceptable”, según CNN. En consecuencia, el 62% de los brasileños considera los aranceles injustificados, según una encuesta de Atlas del 13 de julio. Además, el real cayó un 2.3% frente al dólar tras el anuncio, afectando a empresas como Embraer, según Reuters. Sin embargo, la narrativa de soberanía de Lula ha resonado, con un 49.7% de aprobación, un aumento desde el 47.3% de junio.
Lula capitaliza el apoyo político
La amenaza arancelaria ha unido a sectores antes opuestos a Lula. Por ejemplo, líderes empresariales del agronegocio, tradicionalmente alineados con Bolsonaro, ahora critican los aranceles, según Al Jazeera. En consecuencia, el Congreso, que recientemente anuló un decreto de Lula, firmó una declaración apoyando su plan de reciprocidad arancelaria, según The Washington Post. Además, el senador Hamilton Mourão, exvicepresidente de Bolsonaro, condenó la interferencia de Trump, según The Guardian. Por lo tanto, Lula ha ganado terreno político frente a una oposición fragmentada.
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Impacto en la base de Bolsonaro
La medida de Trump ha debilitado a Bolsonaro, quien enfrenta restricciones judiciales, como un monitor de tobillo y prohibición de redes sociales, según BBC News. Por su parte, el Supremo Tribunal Federal intensificó su caso tras los aranceles, con allanamientos a sus propiedades, según NPR. En consecuencia, analistas como Celso Rocha de Barros sostienen que la intervención de Trump podría empeorar la situación legal de Bolsonaro, según The Guardian. Además, Eduardo Bolsonaro, acusado de influir en Trump, enfrenta críticas por priorizar intereses personales sobre los de Brasil, según The New York Times.
Repercusiones económicas y diplomáticas
Brasil, con un superávit comercial de $7.4 mil millones con EE.UU. en 2024, según el Departamento de Comercio, enfrenta riesgos económicos por los aranceles. Por ejemplo, el café, que representa el 33% del consumo estadounidense, podría encarecerse, según Reuters. Sin embargo, Lula planea contrarrestar con aranceles recíprocos del 50% y apelar a la OMC, según DW. En consecuencia, su gobierno busca fortalecer lazos con China, su mayor socio comercial, según Al Jazeera. Además, la retórica de Lula contra el “imperialismo” de Trump ha revitalizado su imagen, según The Washington Post.
Lula refuerza su candidatura
Con elecciones en 2026, Lula ha encontrado en los aranceles una oportunidad para recuperar apoyo. Por su parte, su mensaje de soberanía, simbolizado por su gorra “Brasil Soberano Nos Une”, ha ganado tracción, con un 20% más de menciones positivas en WhatsApp, según Palver. En consecuencia, su aprobación en el Congreso para exenciones fiscales a los más pobres ha avanzado, según The New York Times. Además, analistas como Thomas Traumann destacan que Lula ha recuperado el favoritismo electoral, según Associated Press. Sin embargo, el juicio de Bolsonaro sigue, con el fiscal general pidiendo una condena, según BBC News.