¿Por qué León XIV? El mensaje detrás del nombre papal de Robert Prevost
Este jueves 8 de mayo de 2025, la Plaza de San Pedro fue testigo de un momento histórico: el cardenal estadounidense Robert Francis Prevost fue elegido como el nuevo Papa, adoptando el nombre de León XIV. Con 69 años, se convierte en el primer pontífice originario de Estados Unidos y el primero de la Orden de San Agustín en liderar la Iglesia Católica. Su elección se dio tras cuatro rondas de votación en el cónclave, marcando un hito en los más de 2,000 años de historia del papado.
Un vínculo profundo con Perú
Aunque nacido en Chicago, Illinois, en 1955, León XIV tiene una conexión especial con Perú. En la década de 1980, fue enviado como misionero agustino a Chulucanas, en Piura, donde trabajó estrechamente con las comunidades locales. En 2015, fue nombrado obispo de la Diócesis de Chiclayo, cargo que ocupó hasta 2023. Durante su tiempo en Perú, adquirió la nacionalidad peruana y actualmente cuenta con un Documento Nacional de Identidad (DNI) vigente.
Su labor en Perú fue reconocida en 2023, cuando recibió la Medalla de Oro de Santo Toribio de Mogrovejo, la distinción más alta del Episcopado Peruano, en gratitud por su servicio a la Iglesia en el país.
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Trayectoria en la Iglesia y cercanía con el Papa Francisco
Prevost ha tenido una destacada carrera dentro de la Iglesia Católica. En 2023, fue designado prefecto del Dicasterio para los Obispos, uno de los cargos más influyentes en la estructura del Vaticano. En 2024, fue elevado al rango de cardenal por el Papa Francisco, con quien compartía una visión reformista y pastoral de la Iglesia.
Su elección como Papa refuerza la continuidad y estabilidad doctrinal en tiempos de polarización política, y simboliza también la superación del tabú de elegir papas de potencias mundiales.
Primer discurso: un llamado a la unidad y la paz
Desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, el nuevo Papa ofreció su primer discurso como líder máximo de la Iglesia Católica. En su mensaje, abogó por una Iglesia misionera, acogedora y sinodal, con un fuerte énfasis en la paz y la unidad. Recordó su tiempo en Perú y expresó su gratitud por las experiencias vividas en el país sudamericano.
Reacciones internacionales y orgullo estadounidense
La elección de León XIV ha sido celebrada en todo el mundo. En Estados Unidos, el presidente Donald Trump expresó su entusiasmo en redes sociales, calificando el acontecimiento como un “gran honor” para el país. Trump había manifestado previamente su deseo de que un estadounidense ocupara el papado, mostrando su preferencia por el cardenal Timothy Michael Dolan de Nueva York.
En Perú, especialmente en Chiclayo, cientos de fieles se reunieron en la catedral para celebrar la elección. Recordaron su paso por el norte del país y los mensajes que compartió con los católicos durante sus años como obispo.
Significado del nombre papal: León XIV
El nombre elegido por el nuevo Papa, León XIV, tiene una fuerte carga histórica. Antes de este nuevo pontífice, ha habido 13 Papas llamados León, entre ellos:
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San León I, el Magno (Papa del 440 al 461): Defendió la doctrina cristiana contra herejías y fue el primer Papa al que se le dio el título de «el Magno».
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León XIII (Papa de 1878 a 1903): Conocido por su encíclica Rerum Novarum, que sentó las bases de la doctrina social de la Iglesia.
El nombre «León» proviene del latín Leo, que significa «león», simbolizando liderazgo firme y protección de los valores tradicionales. La elección de este nombre puede interpretarse como un guiño al liderazgo fuerte en tiempos de crisis y una voluntad de proteger los valores tradicionales mientras se navega por desafíos contemporáneos.
Un pontificado que promete continuidad y renovación
La elección de León XIV marca un nuevo capítulo en la historia de la Iglesia Católica. Con una trayectoria que combina experiencia pastoral en América Latina y liderazgo en el Vaticano, su pontificado promete ser una continuación del espíritu reformador de Francisco, con un enfoque en la unidad, la paz y la cercanía con los fieles. Su doble nacionalidad y profundo vínculo con Perú lo convierten en una figura representativa tanto del clero latinoamericano como del entorno vaticano.