Austria se alzó como campeón de Eurovisión por tercera vez en su historia este sábado 17 de mayo, tras superar a Israel en una final reñida celebrada en la ciudad suiza de Basilea. El cantante Johannes Pietsch, conocido como JJ, conquistó el escenario con su balada operística «Wasted Love«, acumulando 436 puntos que le dieron la victoria sobre el representante israelí Yuval Raphael, quien obtuvo 357 puntos y lideró el voto público. La European Broadcasting Union (EBU) confirmó los resultados, destacando la emoción del momento en que Austria superó a Israel en el último conteo, marcando un nuevo capítulo para el concurso musical más visto de Europa.
La actuación de JJ, un contratenor de 24 años que forma parte del coro de la Ópera Estatal de Viena, combinó un montaje dramático con un barco zarandeado por una tormenta y un giro electrónico que cautivó tanto a los jurados como al público. Israel, por su parte, impresionó con «New Day Will Rise», una balada multilingüe interpretada por Raphael, quien sobrevivió al ataque del 7 de octubre de 2023 en el festival Nova. A pesar de liderar el voto popular con 297 puntos, el apoyo limitado de los jurados dejó a Israel en segundo lugar, a solo 79 puntos de la victoria.
JJ de Austria con el trofeo durante una rueda de prensa tras ganar el Festival de Eurovisión 2025 con la canción “Wasted Love” en Basilea, Suiza. EFE/EPA/GEORGIOS KEFALAS
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La actuación de Austria que brilló en Basilea
La presentación de JJ fue un punto culminante de la noche, destacando su formación clásica y su rango vocal único, comparable al de una mezzosoprano femenina. La EBU detalló que el montaje incluyó efectos de iluminación y un escenario que reflejaba la temática de amor no correspondido de la canción, lo que resonó con los votantes. Austria, que no ganaba desde 2014 con Conchita Wurst, demostró una vez más su capacidad para destacar en el certamen, sumando su tercera victoria tras las de 1966 y 2014. El joven artista, de origen austriaco-filipino, expresó su emoción tras el triunfo, agradeciendo a Europa por hacer realidad su sueño.
El evento, celebrado en el St. Jakobshalle con capacidad para 12,400 personas, atrajo a miles de espectadores y enfrentó desafíos adicionales debido a protestas relacionadas con la participación de Israel. Sin embargo, la actuación de Austria mantuvo su enfoque en la música, evitando controversias y asegurando un resultado sólido. La EBU informó que el país anfitrión, Suiza, quedó en décimo lugar con «Voyage», mientras que Suecia, favorita inicial, terminó cuarta con 321 puntos.

El austriaco JJ con el trofeo de ganador de la 69 edición del Festival de Eurovisión en Basilea (Suiza). EFE/EPA/GEORGIOS KEFALAS
El duelo con Israel y las protestas
El enfrentamiento entre Austria e Israel mantuvo al público en vilo, especialmente tras el conteo del voto público, donde Israel lideró temporalmente con un apoyo masivo de televotantes. La EBU explicó que el sistema de votación, que combina un 50% de jurados y un 50% de público, permitió a Austria remontar gracias a los 258 puntos de los jurados. Durante la presentación de Raphael, dos personas intentaron irrumpir en el escenario y arrojaron pintura, siendo rápidamente detenidas por seguridad y entregadas a la policía de Basilea. La policía local reportó que las protestas, motivadas por el conflicto en Gaza, incluyeron enfrentamientos menores con gases lacrimógenos cerca del centro de la ciudad.
Israel, que ha competido en Eurovisión 46 veces y ha ganado cuatro, enfrentó un ambiente polarizado, similar al del año pasado en Malmö. A pesar de los abucheos y las manifestaciones, Raphael cerró su actuación con un emotivo «Thank you, Europe, Am Yisrael Chai», resonando entre sus seguidores. La EBU reiteró que el concurso permanece abierto a todos los miembros, a pesar de las críticas por la inclusión de Israel tras el veto a Rusia en 2022.
Lo que sigue para Austria en 2026
Con esta victoria, Austria se prepara para albergar Eurovisión 2026, un evento que probablemente tendrá lugar en Viena, ciudad que ya fue sede en 1967 y 2015. La EBU destacó que la organización comenzará pronto, con expectativas de un gran impacto económico y cultural para el país. JJ, quien creció en Dubái y domina inglés, alemán y tagalo, prometió llevar su pasión por la ópera y la música moderna al próximo certamen, mientras planea descansar tras una noche intensa. La celebración en Basilea continuó con un encore de «Wasted Love», dejando a los fans ansiosos por lo que vendrá. Otros países como Estonia (tercero con 356 puntos) y Suecia también dejaron huella, pero Austria se llevó la gloria esta vez.