El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el 3 de agosto de 2025 que su país es el “único” que trabaja para alimentar a la población de Gaza, en medio de una crisis humanitaria que ha dejado más de 60,800 muertos en casi dos años de conflicto, según el Ministerio de Sanidad gazatí. En un discurso en Washington, Trump rechazó calificar las acciones del ejército israelí como genocidio, insistiendo en que lo que ocurre en la Franja es una “guerra”. Su declaración, que destaca los esfuerzos de ayuda de EE.UU. a través de la controvertida Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), ha generado críticas por minimizar la gravedad de la situación y por ignorar las contribuciones de otros países, mientras la violencia y el hambre persisten en el enclave.
Una crisis humanitaria sin precedentes
La Franja de Gaza enfrenta una catástrofe humanitaria, con 95% de su población sin acceso a agua potable y hambre generalizada, según la ONU. Desde el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, que dejó 1,200 muertos y 250 secuestrados, la ofensiva israelí ha causado 60,800 fallecidos, incluyendo 1,500 personas tiroteadas al buscar ayuda y 175 por desnutrición, 93 de ellos niños, según datos oficiales de Gaza. Trump, en una conferencia de prensa, calificó el ataque de Hamás como “de lo peor que he visto” y defendió que EE.UU. lidera los esfuerzos para mitigar el sufrimiento. “Solo queremos que la gente tenga comida, y somos el único país que realmente lo está haciendo”, afirmó, citando contribuciones para comprar alimentos.
Por su parte, el presidente destacó la labor de su enviado especial, Steve Witkoff, quien visitó un punto de distribución de la GHF el viernes. La fundación, creada por EE.UU. e Israel en mayo de 2025, opera cuatro almacenes en el sur de Gaza, pero ha sido señalada por organizaciones como Human Rights Watch por convertir los repartos en “trampas mortales”, con más de 1,000 palestinos muertos en estampidas o tiroteos cerca de estos sitios. En un solo día, durante la visita de Witkoff, 53 personas fallecieron mientras esperaban comida, según el Ministerio de Sanidad gazatí.
Te Recomendamos
Polémica por la Fundación Humanitaria de Gaza
La GHF, respaldada por contratistas privados y tropas israelíes, fue diseñada para reemplazar el sistema de distribución de la ONU, acusado por Israel de permitir desvíos de ayuda hacia Hamás. Sin embargo, la fundación enfrenta críticas por su ineficacia y por operar en un contexto de violencia extrema, con bombardeos israelíes que mataron a 83 personas y dejaron 554 heridos en 24 horas durante la visita de Witkoff, según Al Jazeera. Trump afirmó que EE.UU. ha aportado 60 millones de dólares para alimentos, aunque el Departamento de Estado aclaró que la cifra real es de 30 millones, con 7 millones ya desembolsados en junio de 2025, según Reuters. El presidente no detalló si su nuevo plan implica reforzar la GHF o crear un sistema alternativo.
Pese a todo, Trump insistió en que otros países no han contribuido. Esta afirmación es inexacta: en julio de 2025, Jordania y Emiratos Árabes Unidos realizaron lanzamientos aéreos de 25 toneladas de alimentos, mientras Egipto envió más de 1,200 toneladas en 100 camiones, según la Media Luna Roja Egipcia. La Unión Europea destinó 170 millones de euros en 2025 para ayuda alimentaria en Gaza, según la Comisión Europea. Organizaciones como la ONU y más de 130 ONG han pedido desmantelar la GHF y restaurar el sistema de distribución liderado por Naciones Unidas, considerado más seguro y eficaz.
Reacciones y tensiones internacionales
Por su parte, las declaraciones de Trump han avivado el debate sobre la responsabilidad internacional en Gaza. La ONU ha denunciado restricciones israelíes que limitan la entrada de ayuda, mientras Human Rights Watch acusa a Israel de usar el hambre como arma de guerra, un crimen contra la humanidad. En contraste, Trump elogió la cooperación con Israel y evitó abordar las críticas a la GHF. Su afirmación de que EE.UU. es el único país ayudando ignora esfuerzos de aliados como España, que lanzó 12 toneladas de suministros el viernes, aunque estas operaciones son criticadas por su alto riesgo, según BBC. Mientras Gaza enfrenta bombardeos continuos y una hambruna inminente, con la Clasificación Integrada de Fases de Seguridad Alimentaria alertando sobre muertes por inanición, la comunidad internacional urge un alto el fuego y soluciones humanitarias efectivas.