El presidente ruso Vladimir Putin recibió al enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff, en el Kremlin el 25 de abril para discutir un plan de paz propuesto por la administración de Donald Trump para resolver el conflicto en Ucrania. La reunión, que duró tres horas, fue descrita como “constructiva” por Yuri Ushakov, asesor de política exterior del Kremlin, quien destacó que las posiciones de ambos países se acercaron en temas clave, aunque no se anunciaron acuerdos concretos. El encuentro se produjo horas después de un atentado con coche bomba en Balashikha, cerca de Moscú, que mató al teniente general Yaroslav Moskalik, según el Ministerio de Defensa de Rusia.
Putin y Witkoff en el Kremlin: Enfoque en Ucrania
La discusión entre Putin y Witkoff se centró en la posibilidad de reanudar negociaciones directas entre Rusia y Ucrania, que no han tenido lugar desde las primeras semanas del conflicto en febrero de 2022, según Ushakov. Witkoff, un magnate inmobiliario sin experiencia diplomática previa, presentó propuestas de la Casa Blanca que incluyen el reconocimiento formal de la anexión de Crimea por parte de Rusia y un alto el fuego en las regiones del este de Ucrania controladas por Moscú, según el Departamento de Comunicaciones del Kremlin. Sin embargo, Ucrania ha rechazado estas condiciones, considerándolas una capitulación, según el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania.
El encuentro, al que asistieron el asesor ruso Yuri Ushakov y el enviado de inversiones Kirill Dmitriev, fue el cuarto entre Putin y Witkoff desde enero de 2025, según el Kremlin. Dmitriev calificó las conversaciones como “muy productivas” y mencionó discusiones sobre posibles inversiones conjuntas en el Ártico y minerales de tierras raras, según la Oficina de Promoción de Inversiones de Rusia. La reunión se llevó a cabo en un contexto de tensión, tras un ataque ruso con misiles y drones en Kyiv que dejó 12 muertos el 24 de abril, según la Fuerza Aérea de Ucrania.
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Contexto y reacciones
La visita de Witkoff a Moscú coincidió con un momento de alta sensibilidad geopolítica. El atentado en Balashikha, que las autoridades rusas investigan como un acto terrorista, añadió un trasfondo sombrío al encuentro, según el Ministerio del Interior de Rusia. A pesar de esto, el Kremlin mantuvo la reunión según lo programado, destacando su importancia para el diálogo bilateral. Por su parte, la Casa Blanca, a través de la secretaria de prensa Karoline Leavitt, expresó la frustración de Trump por la falta de avances en las negociaciones, señalando que el presidente “quiere que esta guerra termine” y ha instado a ambas partes a actuar rápido.
En redes sociales, la imagen de Witkoff saludando cordialmente a Putin, diciendo “¿Cómo está, señor presidente?” en inglés, generó comentarios mixtos, con algunos usuarios en X destacando la calidez del encuentro y otros criticando la cercanía con el líder ruso. La reunión también provocó reacciones en Europa, donde el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, expresó dudas sobre la disposición de Rusia para buscar la paz, según un comunicado del Ministerio de Defensa de Alemania emitido tras una reunión de aliados de Ucrania en Bruselas el 25 de abril.
Próximos pasos
Aunque no se esperan avances inmediatos, el Kremlin señaló que la reunión permitió aclarar posiciones y explorar opciones para futuras negociaciones, según Ushakov. Witkoff, quien ha emergido como el principal interlocutor de Trump con Moscú, tiene programado viajar a Omán el 26 de abril para discutir el programa nuclear de Irán, según el Departamento de Estado de EE.UU. Mientras tanto, Trump reiteró su urgencia por un alto el fuego, escribiendo en Truth Social: “Demasiadas personas están muriendo, miles cada semana, en una guerra terrible y sin sentido”.
La reunión en el Kremlin, aunque sin resultados concretos, subraya el esfuerzo de la administración Trump por mediar en el conflicto, a pesar de las críticas de aliados europeos y ucranianos, quienes temen que las propuestas favorezcan los intereses rusos, según el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania. Los próximos días serán clave para determinar si estas conversaciones abren la puerta a un nuevo capítulo en las relaciones entre Washington y Moscú.