El 8 de mayo de 2025, el cardenal Robert Francis Prevost fue elegido como el nuevo pontífice de la Iglesia católica y asumió el nombre de papa León XIV. Su nombramiento marca un hecho histórico: es el primer papa nacido en Estados Unidos. De origen chicaguense y con nacionalidad peruana, su elección fue recibida con entusiasmo en América Latina y con cautela en algunos sectores políticos de su país natal.
Con 69 años, el nuevo papa tiene una trayectoria marcada por su labor como misionero en Perú. Llegó al país andino en 1985, trabajó en la prelatura de Chulucanas, fue arzobispo de Chiclayo y luego prefecto del Dicasterio para los Obispos en el Vaticano. Su estilo pastoral se caracterizó por la cercanía a las comunidades vulnerables y por una sensibilidad social que también ha influido en su percepción política.
Reacciones divididas por el papa León XIV en Estados Unidos
Apenas conocida su elección, el presidente Donald Trump celebró públicamente la noticia a través de su red Truth Social. “Qué emoción y qué gran honor para nuestro país. Estoy deseando conocer al papa León XIV. ¡Será un momento muy significativo!”, escribió. Sin embargo, no todos en el entorno del mandatario compartieron ese entusiasmo.
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La activista Laura Loomer, cercana al movimiento MAGA, calificó al nuevo papa de “anti-Trump, pro-fronteras abiertas y marxista”. Sus críticas se basan en publicaciones realizadas desde una cuenta de X (antes Twitter), que estaría asociada al ahora papa León XIV. Entre los contenidos compartidos por esa cuenta se encuentran artículos de opinión críticos con las políticas migratorias del expresidente Trump y comentarios del vicepresidente J. D. Vance.
Uno de los textos más citados fue un artículo del cardenal Timothy Dolan publicado en 2015, titulado “Por qué la retórica antiinmigrante de Donald Trump es tan problemática”. Aunque el papa no redactó el texto, su difusión generó polémica. También compartió un artículo del National Catholic Reporter que criticaba la interpretación de Vance sobre el amor cristiano jerarquizado, citando que “Jesús no nos pide que clasifiquemos nuestro amor por los demás”.
El papa León XIV durante la misa de hoy en la Capilla Sixtina. EFE/EPA/Vatican Media
Papa León XIV y su legado en América Latina
En Perú, donde vivió más de una década, el papa León XIV es recordado como un líder pastoral cercano y humano. Fue director del seminario agustiniano de Trujillo, enseñó derecho canónico y asumió cargos relevantes en la Conferencia Episcopal Peruana. En 2014, fue nombrado administrador apostólico de Chiclayo por el papa Francisco, y tras años de servicio, recibió la nacionalidad peruana.
Durante la pandemia, también fue administrador de la diócesis del Callao. Quienes lo conocieron destacan su sencillez y su preferencia por compartir festividades con su equipo de trabajo. “Organizaba celebraciones por Fiestas Patrias, cantaba villancicos y disfrutaba de la música criolla peruana”, relató Zuly Castillo, su exsecretaria en Chiclayo. Según ella, era “una persona cercana, sencilla y profundamente agradecida”.
El papa León XIV ha manifestado un cariño especial por Perú. En su primer mensaje desde el balcón de la Basílica de San Pedro, dirigió un saludo particular a los fieles de Chiclayo, recordando los años en que fue obispo en esa ciudad. Habló en español y se refirió al pueblo peruano como una comunidad “fiel y generosa”.
Foto: EFE
Controversia sobre publicaciones atribuidas al papa León XIV
Aunque no está confirmado oficialmente que la cuenta de X usada sea administrada directamente por el papa, el contenido compartido ha generado interpretaciones políticas. En febrero y abril de 2025, esa cuenta republicó artículos que criticaban tanto las políticas de Trump como los discursos de Vance, sugiriendo que priorizar el amor a la patria sobre los migrantes era “contrario al Evangelio”.
En particular, se compartieron textos que hablaban sobre la deportación de Kilmar Ábrego García, un migrante indocumentado deportado por la administración de Trump. Un obispo estadounidense calificó esta política como “campaña de terror y asombro”, y el propio papa Francisco escribió antes de morir que las deportaciones masivas son contrarias a la dignidad humana.
Pese a las críticas, aliados moderados de Trump como Megyn Kelly sugirieron que tal vez el nuevo pontífice no administraba directamente su cuenta en redes sociales. “¿Y si fue manejada por un veinteañero en su equipo?”, se preguntó públicamente, evitando confrontaciones directas.