El alcalde de Nashville, Freddie O’Connell, se encuentra en el centro de una controversia que ha captado la atención nacional, tras ser acusado de presuntamente apoyar a inmigrantes indocumentados y obstruir operaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). El congresista republicano Andy Ogles confirmó este lunes 26 de mayo una investigación federal que busca determinar si O’Connell ha utilizado fondos públicos para lo que algunos han calificado como una «empresa criminal». El tema sigue generando opiniones divididas entre los habitantes de Tennessee.
La investigación surge tras una serie de operativos de ICE a principios de mayo, en los que se arrestaron a cerca de 200 personas en áreas mayoritariamente hispanas de Nashville. Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), 95 de los detenidos tenían antecedentes penales, mientras que 31 habían sido deportados previamente y reingresaron al país. Sin embargo, O’Connell ha sido crítico con estas acciones, alegando que no se ha mostrado evidencia clara de que todos los arrestados tuvieran historiales criminales. «No sabemos ni siquiera los nombres de quiénes arrestaron, mucho menos los cargos», expresó el alcalde, señalando lo que considera una violación al debido proceso.
Freddie O’Connell y las acusaciones
El congresista Ogles ha sido contundente en sus declaraciones, afirmando que si Freddie O’Connell está ayudando a «pandillas violentas a destruir Tennessee al obstruir a ICE, pertenece tras las rejas». La investigación, liderada por los comités de Seguridad Nacional y Judicial de la Cámara de Representantes, examinará si el alcalde ha utilizado fondos públicos para apoyar a inmigrantes indocumentados a través del Belonging Fund, una iniciativa que O’Connell defiende como un recurso para familias afectadas por las redadas. «El Belonging Fund apoya a familias impactadas por actividades migratorias, enfocándose en necesidades básicas como comida, cuidado infantil y vivienda«, explicó el alcalde, enfatizando que no se destinan fondos para servicios legales.
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El DHS también ha criticado duramente al alcalde, acusándolo de priorizar a inmigrantes indocumentados sobre la seguridad de los ciudadanos estadounidenses. Tricia McLaughlin, subsecretaria del DHS, señaló que políticos como O’Connell «prefieren proteger a extranjeros ilegales en lugar de a ciudadanos estadounidenses». Por su parte, el alcalde ha negado las acusaciones de obstrucción, asegurando que su administración está enfocada en mejorar la seguridad de Nashville sin separar familias ni dañar la economía local. Además, ha solicitado al DHS y a la Patrulla de Caminos de Tennessee (THP) que publiquen los nombres y cargos de todos los detenidos, no solo de unos pocos.
El Belonging Fund y la postura de Freddie O’Connell
El Belonging Fund, creado en colaboración con la Comunidad de Tennessee Central y organizaciones como Conexión Américas, ha recaudado más de 240 mil dólares en donaciones privadas para ayudar a familias inmigrantes afectadas por las redadas. O’Connell ha aclarado que no se han utilizado fondos públicos en esta iniciativa, a pesar de las acusaciones de Ogles. «No hay dólares de contribuyentes en ese fondo», afirmó el alcalde, subrayando que el objetivo es apoyar a familias que enfrentan inseguridad alimentaria o problemas de vivienda tras perder a un sostén económico debido a los operativos de ICE.
La controversia ha puesto a Nashville en el ojo del huracán, especialmente porque la ciudad ha enfrentado problemas relacionados con la presencia de grupos criminales como el Tren de Aragua, una pandilla venezolana que ha operado en la región durante los últimos años. En las recientes redadas de ICE, varios miembros de esta pandilla fueron detenidos, lo que ha avivado el debate sobre la inmigración en Tennessee. Mientras tanto, Freddie O’Connell insiste en que su prioridad es proteger a todos los habitantes de Nashville, independientemente de su estatus migratorio, y mantener unida a la comunidad en medio de estas tensiones.