Este lunes 28 de abril, los canadienses se dirigen a las urnas para elegir al próximo primer ministro de Canadá. Tras la sorpresiva renuncia de Justin Trudeau, la carrera por el liderazgo del gobierno se ha convertido en un evento crucial para el futuro de Canadá. En esta elección, los principales contendientes son Mark Carney, del Partido Liberal, y Pierre Poilievre, del Partido Conservador, dos figuras que han capturado la atención de la nación. A medida que las tensiones políticas aumentan, con la sombra de Donald Trump y la reciente tragedia en Vancouver, muchos se preguntan: ¿quién será el próximo primer ministro de Canadá?
¿Por qué son importantes estas elecciones en Canadá?
Las elecciones federales de este año son especialmente significativas, ya que marcan el fin de casi una década de liderazgo de Justin Trudeau. Tras su anuncio de dimisión en enero, la política canadiense se sacudió. Trudeau, quien había sido el rostro del Partido Liberal durante años, dejó el cargo tras enfrentar críticas internas y una disminución de popularidad, además de la creciente presión de la oposición liderada por los conservadores. Esta situación fue exacerbada por las amenazas económicas de Donald Trump, que pusieron en peligro la estabilidad comercial de Canadá.
El retiro de Trudeau abrió la puerta a una feroz competencia por el liderazgo liberal. Mark Carney, un político relativamente nuevo pero con una carrera destacada en el ámbito económico, fue elegido para reemplazarlo. Carney, exgobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, asumió el cargo en un momento crítico. Aunque su falta de un escaño en la Cámara de los Comunes fue un desafío, Carney apostó por convocar elecciones anticipadas en un intento por aprovechar el momento político y desafiar al Partido Conservador, que había ganado terreno rápidamente.
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Fotografía de archivo del primer ministro canadiense, Mark Carney. EFE/EPA/Spencer Colby
Carney y Poilievre: los dos principales candidatos a primer ministro de Canadá
En el lado liberal, Mark Carney se presenta como el candidato a la presidencia del gobierno. A pesar de ser un recién llegado a la política canadiense, Carney es reconocido por su extenso historial en instituciones financieras internacionales. Durante su tiempo como gobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, Carney enfrentó desafíos globales, como la crisis financiera de 2008 y el Brexit. Su enfoque durante la campaña se ha centrado en una postura firme frente a Estados Unidos y la lucha contra las amenazas comerciales de Trump, resaltando que Canadá nunca se convertirá en el estado número 51 de los Estados Unidos. Además, Carney se ha comprometido a combatir la crisis del costo de vida y la escasez de viviendas en el país, abogando por una mayor intervención del gobierno en estos temas.
Por otro lado, Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador, se presenta como el principal rival de Carney. Con un enfoque populista y una retórica agresiva, Poilievre ha ganado popularidad entre aquellos que se sienten excluidos por las élites políticas. Sus propuestas incluyen recortes fiscales, una reforma a la normativa laboral para facilitar la construcción de viviendas y el fortalecimiento de la seguridad pública. Poilievre también ha prometido desafiar las políticas ambientales del gobierno de Carney, argumentando que un enfoque más flexible en los reguladores sería clave para impulsar la economía canadiense.
El líder del Partido Conservador de Canadá, Pierre Poilievre, participa en un evento en la localidad canadiense de Vaughan, a unos 30 kilómetros al norte de Toronto (Canadá). EFE/Julio César Rivas
El sistema electoral canadiense y cómo influye en las elecciones
En Canadá, las elecciones federales no permiten que los votantes elijan directamente al primer ministro. En cambio, los ciudadanos votan por los candidatos a diputados en sus respectivas provincias. El partido que obtenga más escaños en la Cámara de los Comunes será el encargado de formar el gobierno. Si un partido obtiene una mayoría absoluta de 172 escaños, tendrá el control del gobierno. De lo contrario, el partido ganador necesitará coaligarse con otros grupos para formar un gobierno en minoría.
Actualmente, el Partido Liberal lidera las encuestas, y se espera que pueda obtener una mayoría en la Cámara de los Comunes, a pesar de que los conservadores aún representan una amenaza seria. Las últimas encuestas indican que los liberales gozan de un apoyo del 43% frente al 38,9% de los conservadores. Sin embargo, debido a la estructura de las elecciones y las dinámicas de voto en Quebec y Ontario, no se puede dar por sentada la victoria.
Vista de personas que asisten a votar en unas elecciones de Canadá, en una fotografía de archivo. EFE/Valerie Blum
Las encuestas y la previsión de resultados
Las encuestas realizadas en las semanas previas a las elecciones muestran que el Partido Liberal, bajo el liderazgo de Carney, ha logrado recuperar terreno y ahora se encuentra en una posición dominante. Según Nanos Research, los liberales disfrutan de una ventaja significativa, con un 43% de los votos, mientras que los conservadores de Poilievre se mantienen con un 38,9%. Además, el Partido Democrático Nuevo (NDP) y el Bloque Quebequés (BQ) están luchando por mantenerse relevantes, con porcentajes de apoyo cercanos al 6% cada uno.
Con más de siete millones de votantes anticipados, esta elección está mostrando un nivel de participación récord, lo que indica que los canadienses están profundamente involucrados en este proceso electoral. A medida que las elecciones se desarrollan, todos los ojos estarán puestos en las provincias clave, como Ontario y Quebec, donde las decisiones electorales pueden tener un impacto decisivo en los resultados finales.
