Se celebró la elección del nuevo papa por parte del cónclave, un evento que ha captado la atención mundial. El elegido fue Robert Prevost, un cardenal estadounidense, quien asumió el nombre de León XIV. Este nombre rememora al papa León XIII, un pontífice reconocido por su postura en favor de la justicia social y la equidad. Sin embargo, las reacciones ante su elección son mixtas, especialmente en cuanto a su postura sobre temas sociales y políticos, que podrían marcar un cambio significativo respecto a su antecesor, el papa Francisco.
¿Qué se espera del papado de León XIV?
León XIV, el nuevo papa, ha sido considerado una figura más conservadora en comparación con Francisco, especialmente en temas clave como la moral sexual y la postura hacia la comunidad LGBTQ+. Bajo el papado de Francisco, la Iglesia católica adoptó una postura más inclusiva, destacando la aceptación de los homosexuales y la condena de las leyes que criminalizan la homosexualidad. Además, Francisco se mostró a favor de las uniones del mismo sexo y promovió un enfoque pastoral más flexible en diversas regiones.
Sin embargo, con la elección de León XIV, surgen inquietudes sobre un posible retroceso en estas políticas inclusivas. En 2012, en una entrevista con el New York Times, León XIV ya había expresado su desaprobación hacia lo que él consideraba un “estilo de vida homosexual” y una crítica a lo que denominó “familias alternativas”, refiriéndose a las uniones de parejas del mismo sexo y sus hijos adoptivos. Este enfoque de su parte ha generado una gran especulación sobre cómo gestionará estos temas durante su papado.
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El nuevo papa León XIV (i), que cuenta con la nacionalidad de Perú, saluda tras su elección en el Vaticano, este 8 de mayo de 2025. EFE/Alessandro Di Meo
La postura de León XIV sobre la comunidad LGBTQ+
Una de las cuestiones más debatidas es la postura de León XIV respecto a la comunidad LGBTQ+. Históricamente, la Iglesia católica ha sido una de las instituciones más críticas hacia las comunidades homosexuales, no binarias y trans. Bajo el pontificado de Francisco, la Iglesia adoptó una postura más amigable, destacándose por frases célebres como “Quién soy yo para juzgar” y “Ser homosexual no es un delito”. Estas palabras de Francisco resonaron positivamente entre las organizaciones de derechos humanos y la comunidad LGBTQ+, que aplaudieron su enfoque inclusivo y su disposición para revisar la doctrina eclesiástica en temas de sexualidad.
No obstante, con la elección de León XIV, el futuro de esta postura más progresista se encuentra en duda. A pesar de que no se ha pronunciado públicamente sobre los temas de homosexualidad o los derechos de las personas trans desde su nombramiento, sus declaraciones previas y su alineación con una visión conservadora de la Iglesia sugieren que podría alejarse de las posturas inclusivas adoptadas por Francisco. En sus discursos anteriores, León XIV destacó la importancia de adherirse a los principios tradicionales de la fe católica, lo que incluye la concepción de la homosexualidad como un pecado.
La reacción de los activistas y la sociedad civil
La elección de León XIV ha generado reacciones encontradas entre activistas y organizaciones de derechos humanos, especialmente entre aquellos que han luchado por los derechos de la comunidad LGBTQ+ dentro de la Iglesia. Grupos católicos progresistas temen que, bajo su liderazgo, se revirtieran los avances logrados en los últimos años respecto a la inclusión de estas comunidades.
Por otro lado, algunos líderes religiosos conservadores han acogido con entusiasmo la elección de León XIV, esperando que impulse una restauración de los valores tradicionales que caracterizan a la Iglesia católica. Su regreso a la tradición de vestimentas papales ostentosas, a diferencia del estilo más austero de Francisco, ha sido interpretado por algunos como una señal de su deseo de reafirmar los principios de la Iglesia tal y como fueron establecidos por sus predecesores más conservadores.
Varias personas se toman una fotografía este jueves, frente a la Catedral Metropolitana de Lima (Perú). EFE/ Renato Pajuelo
El enfoque de León XIV sobre los derechos humanos y los migrantes
Otro tema que preocupa a muchos es el enfoque del nuevo papa respecto a los derechos humanos y la situación de los migrantes. En su primer discurso público, León XIV, quien tiene doble ciudadanía de Estados Unidos y Perú, hizo un llamado a la paz y a la unidad mundial, pero también subrayó la necesidad de preservar los valores cristianos tradicionales.
A lo largo de su carrera, León XIV ha demostrado un fuerte apoyo a los derechos de los migrantes, especialmente en su tiempo como cardenal en Perú. En sus intervenciones, ha mostrado particular preocupación por la crisis migratoria venezolana, subrayando la necesidad de proteger a los migrantes de políticas injustas y asegurando que la dignidad humana debe ser defendida en todo momento.
El legado de Francisco y el futuro de la Iglesia bajo León XIV
La elección de León XIV plantea interrogantes sobre el futuro de la Iglesia católica, especialmente en un mundo cada vez más polarizado y secularizado. En muchas regiones, especialmente en el sur global, la disminución de la asistencia a los servicios religiosos y la creciente influencia de ideologías progresistas representan desafíos para la Iglesia. En este contexto, León XIV parece querer reforzar la autoridad doctrinal y hacer frente a lo que considera las amenazas que enfrentan los valores tradicionales de la Iglesia.
Mientras tanto, el legado de Francisco, especialmente en temas como la inclusión, los derechos de los migrantes y la lucha contra el cambio climático, continuará siendo una referencia importante. Francisco fue un pionero en muchos de estos temas, y su postura sobre el medio ambiente y los derechos humanos dejó una huella profunda en la Iglesia. Se espera que León XIV, aunque más conservador, también busque mantener algunos de estos elementos de su antecesor, aunque con un enfoque diferente.
