La justicia peruana ratificó este jueves la decisión de anular el juicio contra la líder política Keiko Fujimori, relacionado con la presunta financiación irregular de sus campañas electorales en 2011 y 2016. Esta decisión respalda un fallo previo del Tribunal Constitucional (TC), que había considerado inválido el juicio en curso, específicamente por un vicio en el proceso relacionado con el exdirigente de Fuerza Popular, José Chlimper.
El caso ‘Cócteles’ y su implicación en la política peruana
El caso, conocido como ‘Cócteles’, involucra a Fujimori y a otras 32 personas vinculadas a su partido, Fuerza Popular. El escándalo gira en torno a presuntos aportes ilegales recibidos durante las campañas electorales de 2011 y 2016. Entre los supuestos donantes se encuentra la constructora brasileña Odebrecht, una de las empresas más implicadas en casos de corrupción a nivel global.
Según las acusaciones, los fondos habrían sido recolectados en eventos sociales conocidos como cócteles, organizados por simpatizantes del partido. Sin embargo, el partido fujimorista ha defendido que estos fondos fueron recaudados de manera legítima a través de eventos de apoyo en las campañas electorales.
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Fotografía de archivo de la excandidata presidencial peruana Keiko Fujimori en la primera audiencia del juicio en su contra. EFE/ Paolo Aguilar
La importancia de la decisión del Tribunal Constitucional
La anulación del juicio contra Fujimori se basa principalmente en una sentencia emitida por el Tribunal Constitucional, que determinó que no se le había permitido a José Chlimper conocer adecuadamente los cargos en su contra. Esto llevó al TC a ordenar la reestructuración del caso, dando la oportunidad a la Fiscalía de presentar nuevas pruebas y acusaciones, en consonancia con los procedimientos legales establecidos.
Este fallo ha tenido repercusiones para el resto de los implicados en el caso, ya que el Tribunal consideró que el mismo vicio procesal afectaba a todos los acusados, no solo a Chlimper.
Implicaciones para Keiko Fujimori y Fuerza Popular
La decisión del Tribunal podría prolongar aún más el proceso judicial. Según expertos, la investigación podría retrasarse entre uno y uno y medio antes de que se presenten nuevas acusaciones y se retome el juicio. Mientras tanto, Fujimori y otros miembros de su partido se enfrentan a la posibilidad de un juicio oral, que podría determinar si existe suficiente evidencia para continuar con los cargos de organización criminal, lavado de activos, obstrucción a la justicia y falsedad documental.
La Fiscalía ha solicitado una condena de 30 años y 10 meses de prisión para Fujimori, acusándola de haber recibido aportes ilegales de diversas fuentes, incluidos los mencionados pagos provenientes de Odebrecht.
La excandidata presidencial peruana Keiko Fujimori saluda a su llegada este lunes, a la Corte Superior de Justicia en Lima (Perú). EFE/ Paolo Aguilar
Reacción de Keiko Fujimori: acusaciones de venganzas políticas
Keiko Fujimori, por su parte, ha mantenido su postura de que el proceso en su contra es el resultado de “venganzas políticas” y un intento por perjudicar su carrera y la de su partido. A través de sus redes sociales, la líder fujimorista expresó que, a pesar de las dificultades y el tiempo perdido, su equipo siempre cooperó con la justicia y que el caso nunca tuvo un fundamento sólido.
Fujimori recordó que pasó más de un año en prisión de manera «injusta» entre 2018 y 2019, y calificó el juicio en su contra como un intento de deslegitimar su liderazgo. La ex candidata presidencial añadió que la anulación de la apelación por parte de la justicia confirma que este caso «no tiene futuro».
¿Qué sigue en el caso de Keiko Fujimori?
Con la ratificación de la anulación del juicio y la decisión de la Fiscalía de revisar las pruebas y reestructurar la acusación, el futuro de Keiko Fujimori sigue siendo incierto. La resolución del tribunal no implica una absolución, pero sí podría retrasar los procedimientos judiciales y modificar el curso de la investigación. La líder de Fuerza Popular continúa enfrentando un proceso legal complejo y, mientras tanto, se prepara para la siguiente fase de su defensa.