Una pareja del estado de Washington enfrenta una dura batalla legal y emocional para no ser separada por las políticas migratorias de Estados Unidos. Ante la inminente deportación de una de sus integrantes, una pareja de Washington intenta casarse en centro de detención para evitar deportación, aferrándose a una ceremonia de matrimonio como última esperanza.
Se trata de Yesenia Muñoz, una inmigrante mexicana de 51 años que fue detenida en una redada migratoria mientras trabajaba en la ciudad de Kent, cerca de Seattle. La detención ocurrió apenas unos días antes de su boda con Yanderic Zúñiga, ciudadana estadounidense y su pareja desde hace más de 12 años.
Zúñiga, nacida en Perú y residente legal en Estados Unidos, relató entre lágrimas que la boda había sido pospuesta durante años a la espera de reunir a sus familias. Cuando por fin habían logrado planificarla para finales de mayo, el arresto de Muñoz lo cambió todo.
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Pareja de Washington intenta casarse en centro de detención para evitar deportación tras redada migratoria
Muñoz fue arrestada el 20 de mayo en su centro laboral, durante una operación del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Según su abogada, Xiomara Urán, la mexicana no era el objetivo del operativo y su captura fue “colateral”, es decir, no planificada.
Foto: EFE
De acuerdo con Urán, Muñoz ingresó legalmente a Estados Unidos en 2004 con una visa de turista y desde entonces permaneció en el país. Nunca ha enfrentado cargos criminales, ha trabajado durante años y ha formado una familia estable junto con Zúñiga y su hijo adolescente. “Yesenia representa el ejemplo de inmigrante con buen carácter moral que la ley debería proteger”, afirmó.
La ley de inmigración contempla que una persona sin documentos puede solicitar la cancelación de deportación si ha vivido en el país más de diez años, demuestra buen carácter moral y tiene vínculos familiares fuertes. El matrimonio con Zúñiga podría reforzar esta solicitud y abrir el camino a la residencia legal permanente.
Sin embargo, el tiempo corre en contra. Muñoz tiene una audiencia ante el juez de inmigración John Odell programada para el 24 de junio. Según el informe del TRAC de la Universidad de Syracuse, este juez ha rechazado más del 65% de las solicitudes de libertad bajo fianza entre 2019 y 2024, lo que genera preocupación en el equipo legal.
Por eso, la pareja de Washington intenta casarse en centro de detención para evitar deportación, antes de que la audiencia determine el futuro de Muñoz.
Pareja de Washington intenta casarse en centro de detención para evitar deportación en medio de incertidumbre legal
Casarse en un centro de detención migratorio es legalmente posible. ICE permite las ceremonias dentro de sus instalaciones siempre que se apruebe caso por caso. Pero los obstáculos burocráticos y las nuevas políticas migratorias del gobierno de Donald Trump dificultan el proceso.
Urán ha solicitado a las autoridades de ICE el permiso para ingresar al centro de detención de Tacoma, donde Muñoz permanece recluida. Además de Zúñiga, se necesita el ingreso de un oficiante y dos testigos. También han pedido que el hijo de Zúñiga, de 14 años, pueda asistir. “El niño quiere estar presente, no podemos negarle eso. Ella ha sido como una madre para él”, afirmó la abogada.
Mujeres migrantes deportadas en Estados Unidos. EFE
“Todo está listo, solo falta el visto bueno de ICE”, insistió Urán, quien ha enviado múltiples comunicaciones a las autoridades migratorias sin obtener respuestas claras.
Zúñiga, por su parte, no pierde la esperanza. “Hemos construido una vida juntas. Ella ha cuidado de mí y de mi hijo. No puedo imaginar que la separen de nosotros. Esto no es solo un trámite, es nuestro derecho como familia”, afirmó.
La pareja ha recurrido también al apoyo de organizaciones de derechos civiles y de la comunidad latina en el estado de Washington. Grupos de defensa han comenzado campañas en redes sociales y solicitado a legisladores locales que intercedan ante ICE para permitir el matrimonio.
Una historia de amor amenazada por la deportación
El caso ha generado atención nacional no solo por su dimensión humana, sino porque pone en evidencia la dificultad de muchos inmigrantes de acceder a vías legales dentro del sistema migratorio estadounidense. Mientras una pareja de Washington intenta casarse en centro de detención para evitar deportación, otras cientos de familias enfrentan situaciones similares sin poder visibilizarlas.
Según cifras del propio ICE, hay más de 20,000 personas recluidas en centros de detención migratoria en Estados Unidos. Muchas de ellas tienen vínculos familiares con ciudadanos estadounidenses o han vivido más de una década en el país, pero no cuentan con el apoyo legal o mediático para frenar sus expulsiones.
En este contexto, el matrimonio de Muñoz y Zúñiga no es solo un acto de amor, sino también un recurso legal para defender la permanencia de una familia en territorio estadounidense.
Las próximas semanas serán decisivas para saber si podrán concretar su boda en el centro de detención antes de la audiencia del 24 de junio. Hasta entonces, la pareja continúa luchando contra el tiempo, las políticas migratorias y un sistema que muchas veces parece ignorar el costo humano detrás de cada caso.