La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha expresado su disposición a colaborar con Ronald Johnson, recientemente confirmado como embajador de Estados Unidos en México. Sin embargo, Sheinbaum ha enfatizado que esta colaboración se basará en el respeto mutuo y la defensa de la soberanía nacional, evitando cualquier forma de subordinación.
Designación de Ronald Johnson como embajador
El 9 de abril de 2025, el Senado de Estados Unidos ratificó por estrecho margen a Ronald Johnson como embajador en México, con 49 votos a favor y 46 en contra. Johnson, exagente de la CIA y exembajador en El Salvador durante el primer mandato de Donald Trump, asumirá el cargo en un momento de tensiones bilaterales, marcadas por políticas proteccionistas y debates sobre intervenciones militares unilaterales en México.
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Postura de Claudia Sheinbaum ante la nueva designación
Tras el anuncio de la nominación de Johnson en diciembre de 2024, la presidenta Sheinbaum afirmó que cualquier colaboración con Estados Unidos estaría basada en el respeto a la soberanía nacional y en términos de igualdad. Reiteró que México defendería su condición de país libre e independiente, colaborando sin subordinación. sibles acciones militares contra cárteles en México, rechazando firmemente dicha posibilidad y reafirmando que tales acciones «no están sobre la mesa».
Expectativas de colaboración con Ronald Johnson
A pesar de las diferencias, Sheinbaum ha expresado su disposición a trabajar con Johnson, enfocándose en áreas de interés común como la seguridad y la migración. Ha enfatizado que cualquier colaboración se realizará en el marco del respeto a la soberanía de México y en condiciones de igualdad.
La llegada de Johnson se produce en un contexto de relaciones bilaterales complejas, donde temas como el tráfico de armas y drogas, así como la migración, requieren una cooperación estrecha pero equilibrada. Sheinbaum ha destacado la importancia de abordar estos desafíos sin comprometer la autonomía y dignidad de México.
Mario Guzmán/EFE
Desafíos y oportunidades en la relación bilateral
La relación entre México y Estados Unidos enfrenta múltiples desafíos que demandan una colaboración efectiva pero respetuosa. La cooperación en seguridad es crucial, especialmente en la lucha contra el crimen organizado y el tráfico de drogas. Sin embargo, es esencial que cualquier estrategia respete la soberanía mexicana y sea resultado de acuerdos bilaterales equitativos.
En el ámbito migratorio, ambos países comparten la responsabilidad de abordar las causas y consecuencias de los flujos migratorios. Una colaboración que promueva el bienestar y los derechos humanos de los migrantes es fundamental para una gestión efectiva y humana de este fenómeno.