El pasado sábado, Lady Gaga protagonizó el mayor espectáculo de su carrera, al reunir a más de dos millones de personas en un concierto gratuito en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, Brasil. Sin embargo, el evento, que rompió el récord del concierto con mayor asistencia de una artista femenina en la historia, estuvo marcado por una amenaza de atentado que, según las autoridades brasileñas, fue frustrada por la policía local. Este intento de ataque, planeado por un grupo extremista dedicado a instigar el odio en redes sociales, tenía como objetivo principal a la comunidad LGTBI+.
La amenaza de atentado en Copacabana
De acuerdo con las autoridades brasileñas, un grupo radical había planeado un atentado con explosivos caseros durante el multitudinario concierto de Lady Gaga. La amenaza estaba dirigida específicamente contra la comunidad LGTBI+, que ha sido un tema recurrente en los discursos de odio que proliferan en las redes sociales. Según la policía, los implicados, que estaban reclutando virtualmente a personas para llevar a cabo el ataque, buscaban ganar notoriedad en las redes sociales.
La policía brasileña actuó rápidamente y logró frustrar el atentado antes de que pudiera llevarse a cabo. Un día después del evento, las autoridades informaron sobre la detención de dos personas presuntamente involucradas, incluyendo al líder del grupo y a un adolescente. Los detenidos fueron identificados por su participación en la planificación del ataque, utilizando explosivos improvisados y cócteles molotov.
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Fanáticos de Lady Gaga se reúnen frente al Copacabana Palace para cantar, bailar y rendir tributo a su ‘Mother Monster’. FE/ André Coelho
La reacción de Lady Gaga ante la amenaza
Lady Gaga, que estaba completamente ajena a la amenaza antes y durante el evento, expresó su consternación a través de sus redes sociales una vez que se conoció la noticia. En su mensaje, la cantante expresó su apoyo a las comunidades afectadas, en particular al colectivo LGTBI+, y reafirmó su compromiso con la inclusión y la libertad de expresión.
“La música debe ser un refugio, no un objetivo de odio”, escribió Gaga, destacando que su corazón estaba con todos aquellos que se sintieron vulnerables o asustados durante el evento. Agradeció también la labor de las autoridades brasileñas, especialmente la policía, por su pronta intervención. La cantante concluyó su mensaje reiterando su lucha por el amor y la igualdad, valores fundamentales en su activismo.
El entorno de seguridad durante el concierto
Según un portavoz de Lady Gaga, el equipo de la artista no fue informado de la amenaza antes o durante el concierto, y la seguridad en el evento no presentó ningún inconveniente. La planificación del espectáculo se llevó a cabo en estrecha colaboración con las fuerzas del orden, quienes aseguraron que todas las medidas de seguridad necesarias fueron implementadas. La cantante solo fue informada sobre la amenaza a través de los medios de comunicación después de que el evento concluyó de manera exitosa.
“Antes y durante el espectáculo, no se conocían problemas de seguridad, ni ninguna comunicación de la policía o las autoridades a Lady Gaga sobre posibles riesgos”, afirmó el representante de la artista a la revista The Hollywood Reporter. De acuerdo con el portavoz, el equipo de Gaga confió plenamente en las autoridades locales y en las medidas preventivas que se habían tomado para garantizar la seguridad de los asistentes.
La cantante y compositora estadounidense Lady Gaga se presenta en un macroconcierto gratuito en la playa de Copacabana este sábado, en Río de Janeiro (Brasil). EFE/ Antonio Lacerda
Detenciones y acciones judiciales
La policía local continuó con la investigación, y el domingo, un día después del concierto, se procedió a la detención de dos individuos involucrados en el plan. La policía brasileña detalló que los detenidos eran responsables de reclutar personas para participar en los ataques, con el fin de crear un espectáculo para las redes sociales. Las autoridades también indicaron que la decisión de mantener en secreto el atentado frustrado se tomó con el fin de evitar el pánico entre los asistentes del evento.
El lunes siguiente, un tribunal brasileño dictó prisión preventiva contra el presunto líder del grupo extremista, cuya identidad no ha sido revelada. El hombre había sido liberado bajo fianza, pero volvió a ser detenido por no presentarse a su audiencia judicial. La jueza Fabiana Pagel, quien emitió la orden de prisión, destacó la importancia de combatir el discurso de odio para construir una sociedad más justa y segura, y recalcó el papel crucial de las autoridades en la protección de los derechos humanos.
