Kim Kardashian, reconocida empresaria y defensora de la reforma penitenciaria, ha captado la atención mundial por su vínculo con el célebre caso de los hermanos Menéndez, Lyle y Erik, condenados en 1996 por el asesinato de sus padres, José y Kitty Menéndez. En los últimos meses, Kardashian ha intensificado su apoyo a los hermanos, visitándolos en prisión y abogando por la revisión de sus sentencias de cadena perpetua, según un comunicado del Distrito Attorney de Los Ángeles, George Gascón, del 24 de octubre de 2024. Su conexión con el caso combina su activismo, una relación personal histórica y el impacto de una serie de Netflix que reavivó el interés público.
Kim Kardashian y el caso Menéndez: Una defensa pública
El interés de Kardashian en los hermanos Menéndez se consolidó tras su visita al Centro Correccional Richard J. Donovan en San Diego el 21 de septiembre de 2024, donde habló con Lyle, de 56 años, y Erik, de 53, junto a 40 reclusos sobre reformas penitenciarias. Acompañada por su madre, Kris Jenner, su hermana Khloé y el actor Cooper Koch, quien interpreta a Erik en la serie de Netflix Monsters: The Lyle and Erik Menendez Story, Kardashian destacó el proyecto Greenspace liderado por los hermanos, que busca mejorar patios carcelarios para la rehabilitación, según un comunicado de la Anti-Recidivism Coalition del 23 de septiembre.
Kardashian, quien ha abogado por casos como el de Alice Marie Johnson, liberada en 2018 tras su intervención ante el entonces presidente Donald Trump, escribió un ensayo para NBC News el 3 de octubre, afirmando que los Menéndez “no son monstruos”. Argumentó que los hermanos, quienes alegaron haber sufrido abuso sexual y físico por parte de su padre, no recibieron un juicio justo debido a la exclusión de pruebas de abuso en su segundo juicio. “Han obtenido títulos universitarios, cuidan a ancianos en hospicio y mentoran a otros”, afirmó, citando el testimonio de un guardia que los consideraría “buenos vecinos”.
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Kim Kardashian y el caso Menéndez: Un lazo familiar
La conexión de Kardashian con los Menéndez trasciende su activismo. Su padre, Robert Kardashian, fallecido en 2003, fue un amigo cercano de José Menéndez y abogado defensor en el caso O.J. Simpson, cuya absolución en 1995 ocurrió días antes del segundo juicio de los Menéndez. Según declaraciones de Kris Jenner en el programa The Kardashians el 3 de abril de 2025, Lyle y Erik frecuentaban la casa familiar para jugar tenis con Robert los fines de semana antes de los asesinatos de 1989. Esta relación personal ha influido en la empatía de Kim, quien expresó en el programa: “Conozco la manipulación mediática de casos como este; quiero saber la verdad sobre su abuso”.
El caso Menéndez, ocurrido meses antes del juicio de Simpson, marcó a la familia Kardashian. Kim, entonces adolescente, ha reflexionado sobre cómo la cobertura sensacionalista de los Menéndez los convirtió en “monstruos codiciosos” ante el público, según su ensayo. Su experiencia con el juicio de Simpson, donde Robert fue parte del equipo defensor, la llevó a cuestionar narrativas mediáticas y a involucrarse en la reforma judicial tras aprobar el examen “baby bar” de California en 2021.
Impacto y avances legales
La intervención de Kardashian coincide con un renovado escrutinio del caso, impulsado por la serie de Netflix y nueva evidencia, como una carta de Erik de 1988 que describe el abuso. El 24 de octubre de 2024, George Gascón recomendó la resentencia de los hermanos, argumentando que han “pagado su deuda” tras 35 años en prisión, según su conferencia de prensa. Esto los hace elegibles para una audiencia de libertad condicional el 13 de junio de 2025, pendiente de la aprobación judicial y la revisión del gobernador Gavin Newsom.
Kardashian celebró la decisión en Instagram, agradeciendo a Gascón por “corregir un error significativo”. Sin embargo, un jurado del juicio de 1996 expresó en una declaración el 24 de abril de 2025 que la fama de los Menéndez y el respaldo de Kardashian podrían influir en el resultado, destacando el impacto de su plataforma. Mientras el caso avanza hacia la audiencia, la participación de Kim Kardashian sigue generando debate sobre la justicia, el abuso infantil y el poder de las celebridades en el sistema penal.