Jennifer Lopez ha vuelto a captar la atención del mundo con su gira Up All Night: Live in 2025. Su reciente presentación en el Lucca Summer Festival en Italia desató una ola de reacciones. La cantante de 55 años sorprendió al público con comentarios subidos de tono sobre su vida íntima. Durante el concierto del 21 de julio, la Diva del Bronx habló abiertamente de sus preferencias sexuales, dejando a muchos atónitos. Además, su coreografía sensual y el estreno de nuevas canciones añadieron combustible al debate. La gira, que comenzó el 8 de julio en España, ha generado tanto aplausos como críticas.
En Italia, Lopez interrumpió su actuación para compartir pensamientos personales. “A veces me gusta duro, otras veces prefiero velas y música suave”, dijo entre risas. Estas palabras, pronunciadas en el escenario, se viralizaron rápidamente. La artista también presentó su nuevo sencillo, Up All Night, con letras que aluden a su ex, Ben Affleck. Los fans llenaron las redes sociales con clips de la actuación. Algunos elogiaron su autenticidad, mientras otros la consideraron excesiva. La polémica creció tras comentarios de figuras como Megyn Kelly, quien criticó la actuación.
La polémica en concierto de Tenerife
Antes de Italia, Lopez ya había generado revuelo en España. El 20 de julio, en el Cook Music Fest de Tenerife, su coreografía levantó pasiones. Vestida con un body plateado y acompañada por bailarines, recreó poses sugerentes. Los movimientos, descritos como sensuales, dividieron a la audiencia. En redes sociales, los fans defendieron su libertad artística. Otros, sin embargo, la acusaron de cruzar límites. Kelly, en una publicación en redes, llamó a Lopez “estrella de soft porn”. Sus seguidores respondieron, tachando a la comentarista de envidiosa.
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La actuación en Tenerife mostró a Lopez en plena forma. Su vestuario, diseñado por Yousef Al-Jasmi, destacó por su brillo y audacia. Los bailarines, con atuendos minimalistas, complementaron la energía del show. La canción Wreckage of You, presentada en un evento privado en Los Ángeles, también resonó. Según un asistente, refleja las dificultades de Lopez tras su divorcio de Affleck en enero de 2025. La Administración de Turismo de Tenerife reportó un aumento de visitantes por el concierto, con 12,000 asistentes.
La gira y su polémica en concierto
La gira Up All Night abarca 21 shows en Europa y Asia. Inició en Pontevedra, España, y terminará el 12 de agosto en Cerdeña. Lopez ha incluido éxitos como On the Floor y Let’s Get Loud, junto con temas nuevos. En Barcelona, el 15 de julio, su show en el Palau Sant Jordi recibió críticas mixtas. Algunos fans notaron que habló solo en inglés, a pesar de dominar el español. Esto generó debate, ya que la cantante, de raíces puertorriqueñas, suele celebrar su herencia latina.
La producción de la gira destaca por su glamour. Los trajes, creados por estilistas como Rob Zangardi, son un espectáculo aparte. En Madrid, Lopez usó botas altas incrustadas con cristales, un sello de su estilo. La Oficina de Turismo de Cataluña destacó que el concierto atrajo a 15,000 personas. A pesar de las críticas, Lopez sigue conectando con sus fans. En Bilbao, respondió con humor a un cartel que pedía matrimonio, diciendo que está “terminada” con las bodas tras cuatro divorcios.
El impacto de Jennifer Lopez
Lopez, con más de 80 millones de discos vendidos, sigue siendo una fuerza en la música. Su gira ha generado ingresos significativos, con 6.5 millones de dólares proyectados en Astana, según autoridades locales. Los fans admiran su energía a los 55 años. En redes, los comentarios van desde “¿Cómo luce tan joven?” hasta elogios por su disciplina. Sin embargo, las críticas por su estilo provocador persisten. Lopez no ha respondido directamente a las acusaciones. Su equipo mantiene el enfoque en la música y la conexión con el público.
Mientras la gira avanza, Lopez se prepara para una residencia en Las Vegas en diciembre. Su nuevo material, inspirado en su vida personal, promete mantenerla en el centro de atención. Los fans esperan más momentos memorables antes de que el tour termine en Cerdeña. Por ahora, Jennifer Lopez sigue brillando, desafiando críticas y celebrando su libertad en el escenario.