Una serie de tormentas y tornados devastadoras han dejado un saldo trágico en el centro de Estados Unidos, con al menos 16 personas fallecidas entre Texas y Ohio debido a inundaciones históricas y tornados violentos. Desde el pasado miércoles 2 de abril de 2025, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) ha registrado más de 30 tornados confirmados que han arrasado hogares, derribado líneas eléctricas y causado estragos en comunidades desde el sur hasta el medio oeste. Las lluvias torrenciales, descritas como un evento «generacional» por las autoridades, han provocado crecidas récord en ríos como el Ohio y el Mississippi, dejando a miles de personas atrapadas y sin energía eléctrica este sábado 5 de abril.
En Texas, la ciudad de Texarkana enfrentó una emergencia por inundaciones repentinas el viernes, con reportes de vehículos arrastrados por corrientes que alcanzaron niveles históricos. El NWS informó que algunas áreas del estado recibieron hasta 10 pulgadas de lluvia en menos de 24 horas, un volumen que ha desbordado arroyos y carreteras. Más al norte, en Ohio, el río Ohio alcanzó niveles críticos, con Louisville registrando una cresta de 23 pies por encima de lo normal, según el alcalde Craig Greenberg. Las autoridades locales han realizado cientos de rescates acuáticos en ambos estados mientras las tormentas continúan azotando la región.
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Inundaciones agravan el caos tras los tornados
El impacto de las inundaciones se ha sentido con fuerza en estados como Arkansas, Missouri y Tennessee, donde los tornados iniciales ya habían dejado un rastro de destrucción. En Lake City, Arkansas, la División de Manejo de Emergencias estatal reportó daños en 22 condados, con casas reducidas a escombros y equipos de emergencia trabajando sin descanso para rescatar a sobrevivientes. El NWS calificó el riesgo de inundaciones como «catastrófico», advirtiendo que algunas zonas podrían recibir hasta 15 pulgadas de lluvia antes del domingo, lo que podría desbordar aún más los ríos y agravar la crisis.
En Ohio, el condado de Hamilton vio cómo el agua sumergió vecindarios enteros en Cincinnati, obligando a los residentes a evacuar con lo que podían llevar. La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) desplegó equipos adicionales este sábado para asistir en las operaciones de búsqueda y rescate. Mientras tanto, en Texas, el gobernador Greg Abbott activó recursos estatales para apoyar a las comunidades afectadas, destacando que «la prioridad es salvar vidas y proteger a los texanos en peligro». Los cortes de energía también han complicado la respuesta, con más de 250,000 hogares y negocios sin electricidad en varios estados, según datos del DHS.
Inundaciones y tornados: una amenaza constante
La combinación de tornados y inundaciones ha convertido esta semana en una de las más mortales por clima extremo en lo que va de 2025. En Tennessee, el condado de Fayette reportó la muerte de un hombre de 48 años y su hija de 16 cuando un tornado volcó su casa rodante el jueves por la mañana, según la oficina del sheriff local. En Missouri, el sargento Clark Parrott de la Patrulla de Carreteras confirmó al menos una víctima mortal en el sureste del estado, mientras que Kentucky informó de cuatro heridos en Ballard County tras el colapso de un refugio improvisado.
El NWS ha extendido las advertencias hasta el domingo, con un riesgo continuo de tormentas severas desde el sur de Texas hasta el valle del Ohio. En Memphis, las autoridades locales vigilan de cerca el río Mississippi, que amenaza con desbordarse tras días de lluvias incesantes.
El Departamento de Transporte de Arkansas cerró varias carreteras importantes debido a deslizamientos de tierra y agua acumulada, mientras que en Indiana, los equipos de emergencia en Indianapolis realizaron rescates en áreas donde el agua alcanzó las ventanas de los autos. Aunque la intensidad de los tornados ha disminuido ligeramente este sábado, las inundaciones siguen siendo la principal preocupación para millones de personas en la región, con el pronóstico indicando más lluvias en las próximas horas.