La icónica serie animada South Park volvió a la pantalla el 23 de julio de 2025 tras dos años de ausencia, desatando controversia con un episodio que ridiculiza al presidente Donald Trump. El capítulo inaugural de la temporada 27, transmitido por Paramount, coloca a Trump en el centro de una sátira mordaz, incluyendo escenas con Satanás y referencias a temas sensibles como la lista de Epstein. Este regreso, respaldado por un contrato de 1,500 millones de dólares con los creadores Trey Parker y Matt Stone, ha generado reacciones encontradas, desde aplausos por su irreverencia hasta críticas por su tono provocador.
South Park y su burla hacia Trump: el episodio polémico
El primer episodio, titulado The Billion Dollar Bet, muestra a Trump en situaciones absurdas y subidas de tono. En una escena, aparece decorando la Casa Blanca con fotos suyas desnudo, mientras que en otra comparte una cama con Satanás, quien lo cuestiona sobre su presencia en la “lista de Epstein”. Trump, fiel a su estilo, responde con evasivas, pidiendo a todos que “se relajen”. Además, el capítulo incluye una conversación con una versión animada del primer ministro canadiense Mark Carney, quien critica los aranceles impuestos por Trump. El presidente, confundiendo países, ignora el tema con desdén. La sátira también utiliza imágenes generadas por inteligencia artificial, como una secuencia donde Trump corre desnudo por un desierto, amplificando el tono provocador del episodio.
Por su parte, el estreno enfrentó retrasos debido a negociaciones entre Paramount y los creadores, quienes firmaron un acuerdo en 2024 para extender South Park por diez años más. La serie, conocida por abordar temas políticos y culturales con humor ácido, no escatimó en críticas a la administración actual. Según Nielsen, el episodio atrajo a 3.2 millones de espectadores en EE.UU., un aumento del 15% respecto a la última temporada, reflejando el impacto de su regreso y la polarización que genera.
Te Recomendamos
Reacciones divididas por la burla hacia Trump
La respuesta del público ha sido diversa. En redes sociales, algunos fans elogiaron el regreso de la serie por su audacia, destacando frases como “el tipo con el brazo ondulado en el estacionamiento de la Casa Blanca” o la referencia al minuto 9:11 en la escena con Satanás. Sin embargo, otros criticaron los chistes como “baratos” o acusaron a South Park de “pasarse de la raya” al centrarse en Trump. Parker y Stone, quienes han insistido en que su sátira no sigue una agenda política, defendieron su enfoque como una crítica al poder, independientemente del partido. En un comunicado, expresaron frustración por la fusión de Paramount con Skydance, que, según ellos, “está arruinando” la producción de la serie.
Además, el episodio alude a una demanda reciente de Trump contra CBS, propiedad de Paramount, por presuntamente editar una entrevista con la vicepresidenta Kamala Harris en 60 Minutes. Esta mención, junto con las referencias a los aranceles y la política migratoria de Trump, conecta la sátira con eventos actuales, aumentando su relevancia. En 2024, los aranceles de Trump generaron pérdidas de 2,300 millones de dólares a empresas estadounidenses, según la Cámara de Comercio de EE.UU., un tema que South Park aborda con su característico humor.
Contexto de la burla hacia Trump en South Park
El regreso de South Park coincide con un momento de alta polarización política en EE.UU. Trump, quien asumió su segundo mandato en enero de 2025, enfrenta críticas por medidas como los aranceles del 30% a socios comerciales y las redadas migratorias, que han detenido a 66,000 personas en 2025, según el Departamento de Seguridad Nacional. La serie, que lleva 28 años satirizando figuras públicas, ha abordado a Trump en temporadas pasadas, pero esta vez su enfoque ha sido más directo. Mientras los fans debaten si el episodio cruza líneas éticas, la atención mediática asegura que South Park seguirá siendo un referente en la crítica cultural, con nuevos capítulos programados para emitirse semanalmente hasta septiembre.