General ruso muere en atentado con coche bomba cerca de Moscú antes de reunión clave entre Putin y enviado de Trump
Un alto mando militar ruso falleció este viernes en un atentado con coche bomba en la ciudad de Balashikha, a las afueras de Moscú, según confirmaron las autoridades. La explosión ocurrió pocas horas antes de una reunión entre el presidente Vladimir Putin y Steve Witkoff, enviado especial del presidente estadounidense Donald Trump, en el Kremlin.
Atentado en Balashikha cobra la vida de un general ruso
El general Yaroslav Moskalik, subdirector de la Dirección Principal de Operaciones del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas, murió al detonar un artefacto explosivo improvisado cargado de metralla en un vehículo estacionado cerca de un edificio residencial en Balashikha, a menos de 30 kilómetros al este de Moscú. Según el Comité de Investigación de Rusia, la bomba estaba colocada en un Volkswagen Golf y fue activada a distancia cuando Moskalik pasaba cerca del automóvil. El ataque ocurrió en una urbanización destinada a militares retirados.
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Este atentado es el segundo en cuatro meses que cobra la vida de un alto oficial militar ruso. En diciembre pasado, el teniente general Igor Kirillov, jefe de las fuerzas de protección radiológica, biológica y química, murió al estallar una bomba oculta en un patinete eléctrico frente a su residencia en Moscú. Ucrania se atribuyó la autoría de ese ataque.
Hasta el momento, ninguna organización ha reivindicado la autoría del atentado contra Moskalik. Sin embargo, fuentes de seguridad rusas sospechan que los servicios secretos ucranianos podrían estar involucrados, dada la similitud con ataques anteriores.
Reunión entre Putin y enviado de Trump en medio de tensiones
Horas después del atentado, el presidente Vladimir Putin recibió en el Kremlin a Steve Witkoff, enviado especial del presidente Donald Trump, para discutir una propuesta de alto el fuego en Ucrania. La reunión, que marca el cuarto encuentro entre ambos en lo que va del año, se produce en un momento de creciente tensión y violencia en la región.
Durante la reunión, Witkoff transmitió a Putin la propuesta de Trump para un alto el fuego de 30 días en Ucrania. El Kremlin ha expresado escepticismo sobre la iniciativa, argumentando que podría ser utilizada por Ucrania para reagruparse y fortalecer sus posiciones. El asesor presidencial ruso Yuri Ushakov afirmó que un alto el fuego temporal «no nos aporta nada» y solo beneficiaría a las fuerzas ucranianas.
Por su parte, Trump ha calificado las reuniones de su enviado como «muy productivas» y ha desmentido rumores sobre largas esperas antes de ser recibido por Putin. El mandatario estadounidense ha expresado su deseo de alcanzar un acuerdo de paz en los primeros 100 días de su presidencia.
Investigaciones en curso y aumento de la violencia
El Comité de Investigación de Rusia ha abierto una causa penal por el asesinato de Moskalik y continúa examinando la escena del crimen. Expertos forenses y agentes de la ley trabajan para identificar a los responsables del atentado.
El atentado contra Moskalik se produce en un contexto de intensificación de la violencia en la región. Días antes, Rusia lanzó un ataque con drones en el este de Ucrania, considerado el más mortífero en casi un año, lo que ha elevado las tensiones en medio de las negociaciones de paz.
La comunidad internacional observa con preocupación el aumento de los atentados contra altos funcionarios rusos y la escalada del conflicto en Ucrania, mientras las negociaciones para un alto el fuego enfrentan múltiples obstáculos.
