FBI forma equipo especial por ataques a Tesla
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) ha establecido un grupo especial en colaboración con la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) para investigar una serie de ataques violentos dirigidos contra vehículos, concesionarios y estaciones de carga de Tesla en Estados Unidos. Estos incidentes, que incluyen incendios provocados y vandalismo, han sido catalogados oficialmente como actos de «terrorismo doméstico».
Incremento de ataques contra Tesla
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Desde enero, se ha observado un aumento significativo en los ataques contra propiedades de Tesla. Solo en marzo, se han reportado 48 incidentes, de los cuales siete están bajo investigación activa. Estos ataques han ocurrido en diversos estados, incluyendo Nevada y Misuri, donde recientemente se incendiaron varios vehículos en concesionarios de Tesla.
Respuesta del gobierno y medidas legales
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, ha condenado enérgicamente estos actos, calificándolos como «terrorismo doméstico». Bondi ha prometido imponer «consecuencias severas» a los responsables, incluyendo a aquellos que coordinan o financian estos crímenes. Hasta la fecha, tres personas han sido acusadas formalmente, enfrentando penas mínimas obligatorias de cinco años de prisión.
Implicaciones políticas y reacciones públicas
La escalada de violencia contra Tesla se produce en un contexto de creciente polarización política. Elon Musk, CEO de Tesla, fue designado por el presidente Donald Trump para liderar el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una entidad encargada de reducir gastos y burocracia en el gobierno federal. Esta colaboración ha generado controversia y ha sido interpretada por algunos como una amenaza a las instituciones democráticas.
El presidente Trump ha expresado su indignación por los ataques, calificando a los perpetradores como «terroristas enfermos» y sugiriendo penas de prisión de hasta 20 años. Además, ha insinuado que podrían cumplir sus condenas en prisiones de El Salvador, conocidas por sus estrictas condiciones.
Investigaciones en curso y medidas preventivas
El grupo especial del FBI, compuesto por diez miembros, incluyendo agentes especiales y analistas de inteligencia, trabaja en conjunto con las fuerzas del orden locales para identificar y detener a los responsables de estos ataques. Las autoridades están investigando posibles vínculos con grupos anarquistas que promueven la violencia contra Tesla y han detectado convocatorias para protestas nacionales bajo el lema «Tesla Takedown» programadas para el 29 de marzo.
El director del FBI, Kash Patel, ha enfatizado el compromiso de la agencia para garantizar la seguridad pública y llevar a los culpables ante la justicia. Por su parte, Elon Musk ha expresado su preocupación por la seguridad de sus empleados y ha calificado a los atacantes como «psicópatas».
Impacto en el mercado y percepción pública
A pesar de la ola de ataques, las acciones de Tesla experimentaron un aumento del 12% el pasado lunes, lo que indica la resiliencia de la compañía en el mercado. Sin embargo, la percepción pública se encuentra dividida. Mientras algunos critican la estrecha relación entre Musk y la administración Trump, otros respaldan las medidas enérgicas contra los actos de vandalismo.
La situación actual refleja las tensiones existentes en la sociedad estadounidense, donde las acciones contra una empresa pueden tener profundas implicaciones políticas y sociales. El desarrollo de las investigaciones y las respuestas gubernamentales serán cruciales para abordar este complejo escenario.
