La región de New England vive momentos de incertidumbre tras el hallazgo de un octavo cuerpo en menos de dos meses, intensificando los temores de un posible asesino serial. El cadáver de una mujer, aún sin identificar, fue encontrado el 22 de abril de 2025 cerca de una pista de bicicletas en el 1500 de Hall of Fame Avenue, Springfield, Massachusetts, según un comunicado del Departamento de Policía de Springfield. Este descubrimiento se suma a una serie de ocho homicidios reportados desde marzo en Connecticut, Rhode Island y Massachusetts, generando alarma entre residentes y especulaciones en redes sociales.
New England: Una serie de hallazgos inquietantes
El cuerpo encontrado en Springfield fue declarado muerto en el lugar por oficiales y personal médico, según el portavoz del Departamento de Policía de Springfield, Ryan Walsh, el 22 de abril. La unidad de homicidios, bajo la dirección del capitán Trent Duda, inició una investigación por “muerte desatendida” en colaboración con la Unidad de Homicidios de la Fiscalía del Condado de Hampden, pendiente de una autopsia. Aunque las autoridades no han confirmado un vínculo entre este caso y los siete anteriores, la proximidad geográfica y temporal de los hallazgos ha desatado preocupación.
Desde principios de marzo, los restos de ocho personas, en su mayoría mujeres, han sido descubiertos en zonas rurales y boscosas de New England. Entre ellos, el 6 de marzo se encontró el cuerpo de Paige Fannon, de 35 años, en el río Norwalk, Connecticut, tras ser reportada como desaparecida. El 21 de marzo, los restos de Denise Leary, de 59 años, fueron identificados en New Haven, según la Policía Estatal de Connecticut. El 26 de marzo, Michele Romano, de 56 años, fue hallada en Foster, Rhode Island, aunque su familia descartó relación con un asesino serial, según un comunicado de la Policía Estatal de Rhode Island.
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Investigaciones sin conexión oficial
Las autoridades han enfatizado que no hay evidencia que conecte los ocho homicidios. La Policía Estatal de Connecticut afirmó el 11 de abril que “no hay información que sugiera una conexión entre los descubrimientos de restos” y que “no existe una amenaza conocida para el público”. En Springfield, Walsh reiteró que la investigación está en etapas iniciales y que la autopsia determinará la causa de la muerte. Sin embargo, la frecuencia de los hallazgos ha generado especulaciones, especialmente en redes sociales, donde un grupo de Facebook llamado “New England Serial Killer” ha crecido a más de 65,000 miembros, según datos de la plataforma.
Peter Valentin, presidente del Departamento de Ciencias Forenses de la Universidad de New Haven, destacó que la falta de información sobre la causa de la muerte en el caso de Springfield dificulta determinar si se trata de un homicidio. “Es curioso que no se haya encontrado parafernalia que descarte un homicidio, pero la investigación parece minimizar esa posibilidad”, afirmó Valentin el 23 de abril. En al menos tres casos, las autoridades han descartado juego sucio, pero la incertidumbre persiste en los demás.
New England: La comunidad en alerta
Los residentes de New England, especialmente en áreas rurales y costeras, han aumentado su vigilancia. El jefe de policía de Groton, Louis Fusaro, instó a la población el 11 de abril a “no apresurarse a sacar conclusiones” y a reportar cualquier comportamiento sospechoso. En Killingly, Connecticut, donde se encontraron restos el 9 de abril, la policía estatal aseguró que la investigación sigue activa, pero no hay indicios de un patrón que conecte los casos.
La especulación sobre un asesino serial ha sido alimentada por la historia de la región, marcada por casos como el del Asesino del Valle del Río Connecticut, responsable de al menos siete asesinatos entre 1978 y 1988. Aunque las autoridades descartan un vínculo con esos crímenes históricos, la comunidad exige respuestas. Mientras las investigaciones avanzan, los departamentos de policía de Massachusetts, Connecticut y Rhode Island trabajan en colaboración, pero la falta de identificaciones y causas de muerte en varios casos mantiene a New England en vilo.