El Inter Miami enfrenta un desafío monumental esta noche, 30 de abril de 2025, al recibir al Vancouver Whitecaps en el Chase Stadium para el partido de vuelta de las semifinales de la Concacaf Champions Cup.
Tras caer 2-0 en el encuentro de ida en Canadá, el equipo liderado por Lionel Messi necesita una victoria por tres goles de diferencia para avanzar directamente a la final, o por dos goles para forzar el alargue, debido a la regla del gol de visitante que aún rige en la competición. Con un aforo esperado de más de 21,000 aficionados, el Inter Miami, dirigido por el nuevo entrenador Javier Mascherano, buscará revertir la serie ante un Vancouver que ha demostrado solidez defensiva. El ganador enfrentará al vencedor del cruce entre Tigres y Cruz Azul en la final del 1 de junio.
Inter Miami y el desafío de la remontada
La derrota por 2-0 en el BC Place el pasado 24 de abril dejó al Inter Miami en una posición complicada. Los goles de Ryan Gauld y Brian White, combinados con una actuación destacada del portero Yohei Takaoka, frustraron los intentos de los Herons, que no lograron capitalizar las ocasiones creadas por Messi y Luis Suárez, según el reporte de la Concacaf.
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En el partido de ida, Inter Miami jugó con diez hombres tras la expulsión de Tomás Avilés en el minuto 23, lo que limitó su capacidad de reacción. Mascherano, en su primera temporada como técnico, enfatizó la importancia de la afición para empujar al equipo en casa. La Concacaf señaló que Inter Miami ha ganado sus últimos cuatro partidos como local en la Champions Cup, incluyendo una remontada 3-1 ante Los Angeles FC en cuartos de final, lo que mantiene viva la esperanza de una hazaña similar.
Claves para el partido de vuelta
Para lograr la remontada en la Concacaf Champions Cup, Inter Miami dependerá de su tridente ofensivo: Messi, Suárez y Leonardo Campana. Messi, con dos asistencias en el torneo, y Suárez, con un gol en la ida anulado por fuera de juego, serán fundamentales para romper la defensa de Vancouver, que ha mantenido la portería en cero en tres de sus últimos cinco partidos de la competición.
La Concacaf destacó que Inter Miami promedia 2.3 goles por partido en casa en esta edición, un factor que podría ser decisivo. Sin embargo, la ausencia de Avilés por suspensión obliga a Mascherano a ajustar la defensa, con Ian Fray como probable reemplazo. Por su parte, Vancouver llega con confianza tras su victoria en la ida y su sólido desempeño en la MLS, donde ocupan el cuarto puesto en la Conferencia Oeste con 14 puntos, según la Major League Soccer.
Contexto y expectativas
El partido de esta noche no solo definirá el futuro del equipo en la Concacaf Champions Cup, sino que también marcará un hito en su temporada 2025, que incluye su participación en el FIFA Club World Cup en junio, tras ganar el Supporters’ Shield 2024 con un récord de 74 puntos, según la MLS. La Autoridad de Turismo de Miami-Dade anticipa un impacto económico de 5 millones de dólares por el encuentro, con aficionados viajando desde todo el sur de Florida para apoyar al equipo.
Los Herons, que vienen de una derrota 3-4 ante FC Dallas en la MLS el 26 de abril, buscan recuperar el impulso en un torneo donde ya eliminaron a Sporting Kansas City en la ronda previa con un global de 4-1. Los aficionados pueden seguir el partido en vivo a través de las plataformas oficiales de la Concacaf y adquirir entradas en los canales autorizados.
Con el Chase Stadium listo para vibrar, Inter Miami se juega más que un pase a la final. Una victoria consolidaría su estatus como potencia emergente en el fútbol norteamericano y daría un impulso anímico de cara al Mundial de Clubes. Vancouver, sin embargo, no será un rival fácil, con un planteamiento táctico que ya sorprendió a los Herons en la ida. La magia de Messi, el olfato goleador de Suárez y el apoyo de la afición serán cruciales para determinar si Inter Miami puede escribir otro capítulo histórico en su corta pero intensa trayectoria.
