Un nuevo tatuaje temporal podría cambiar la forma en que las personas se protegen en bares y fiestas. Investigadores surcoreanos han creado una pegatina que detecta GHB (gamma-hidroxibutirato), conocido como éxtasis líquido, en bebidas. Este compuesto, incoloro e insípido, se usa en delitos como agresiones sexuales o robos. La tecnología, descrita en un artículo de ACS Sensors el 23 de julio de 2025, reacciona en un segundo. Con un diseño discreto, la pegatina se adhiere a la piel como un tatuaje. Este avance promete ser una herramienta accesible para prevenir la sumisión química.
El GHB induce un estado similar a una intoxicación alcohólica grave. Esto deja a las víctimas vulnerables a agresiones o estafas. En los últimos años, los casos de sumisión química han aumentado en ciudades grandes. Los delincuentes usan esta droga para acceder a móviles mediante reconocimiento facial. Luego, vacían cuentas bancarias sin que la víctima lo note. La Fundación Nacional de Investigación de Corea financió este proyecto, que busca soluciones prácticas.
Innovación contra el GHB
Los investigadores, liderados por Gyeong-Ji Kim de la Universidad Sungkyunkwan, diseñaron una pegatina que imita tatuajes comerciales. La pegatina usa un gel con un receptor químico, BHEI, que se vuelve rojo al detectar GHB. El material incluye una película de polimetilsiloxano (PDMS) y una solución de alcohol polivinílico (PVA). Para adherirse a la piel, se aplica un pegamento ligero. La pegatina detectó GHB en bebidas como whisky, vodka, cerveza, soju y café. Incluso identificó concentraciones bajas de 0.01 mg/mL en un segundo.
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El proceso es simple: mojas un dedo en la bebida, tocas la pegatina y ves el resultado. Si el GHB está presente, el tatuaje cambia de color al instante. Esto elimina la espera de minutos que requieren otros métodos, como tiras reactivas. Esas tiras, además, son más visibles y pueden alertar al agresor. La discreción del tatuaje temporal lo hace ideal para entornos sociales. Su diseño se integra con patrones de tatuajes populares, pasando desapercibido.
Resistente y eficaz
La durabilidad de la pegatina es otro punto fuerte. Los científicos probaron su resistencia al agua, torsión y estiramiento. También evaluaron su adhesión y resistencia a rasguños. El tatuaje temporal mantuvo su funcionalidad en todas las pruebas. Un detalle clave: el cambio de color permanece visible hasta 30 días. Esto podría servir como evidencia en investigaciones de sumisión química. La Fundación Nacional de Investigación de Corea destacó su potencial como prueba forense.
El dispositivo es económico y fácil de producir. Los investigadores usaron materiales como PDMS y PVA, que son accesibles. La fabricación no requiere procesos complejos, lo que facilita su comercialización. Podría estar pronto en el mercado, según el equipo. El Ministerio de Seguridad Alimentaria y Farmacéutica de Corea apoya su desarrollo. La pegatina podría venderse a bajo costo, haciéndola accesible para todos.
Un paso contra la sumisión química
El aumento de delitos con GHB ha generado alarma. En bares y clubes, las víctimas a menudo no notan la manipulación de sus bebidas. El tatuaje temporal ofrece una solución proactiva. Su rapidez y discreción empoderan a los usuarios. Puedes probar tu bebida sin levantar sospechas. Esto es crucial en entornos donde la vigilancia constante es difícil.
El proyecto también recibió apoyo del Centro Nacional de Nanofabricación de Corea. Los investigadores planean mejorar los diseños para hacerlos aún más atractivos. La pegatina no solo detecta GHB, sino que podría adaptarse para otras sustancias en el futuro. Por ahora, este tatuaje temporal es un avance prometedor. Podría salvar vidas y prevenir delitos en todo el mundo.