Israel bombardea el sur de Beirut tras meses de tregua
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) llevaron a cabo este viernes un ataque aéreo en los suburbios del sur de Beirut, marcando la primera acción de este tipo desde el alto el fuego acordado en noviembre de 2024. El objetivo, según fuentes militares israelíes, era una instalación utilizada por Hezbollah para el almacenamiento de drones en la zona de Dahiyeh, un bastión clave del grupo en la capital libanesa.
Detalles del ataque y respuesta de Hezbollah
El bombardeo se produjo después de que Israel detectara el lanzamiento de dos proyectiles desde el Líbano hacia su territorio. Uno de los cohetes fue interceptado por el sistema de defensa israelí, mientras que el otro cayó en suelo libanés. En respuesta, las FDI atacaron la mencionada infraestructura en Beirut, causando daños significativos. Hezbollah negó cualquier implicación en el lanzamiento de los proyectiles y acusó a Israel de buscar pretextos para reanudar su ofensiva.
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Evacuación y medidas de seguridad
Previo al ataque, el ejército israelí emitió órdenes de evacuación a los residentes del edificio objetivo y sus alrededores, instándolos a alejarse al menos 300 metros por su seguridad. La zona afectada alberga varias escuelas, lo que llevó al gobierno libanés a suspender las clases y a evacuar a estudiantes, profesores y personal administrativo.
Reacciones internacionales y tensiones crecientes
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró que Israel continuará atacando zonas de Líbano si percibe cualquier amenaza. El ministro de Defensa, Israel Katz, advirtió que si no hay paz en Kiryat Shmona y las comunidades de Galilea, tampoco la habrá en Beirut, responsabilizando al gobierno libanés por los ataques desde su territorio.
El presidente de Líbano, Joseph Aoun, condenó el ataque y solicitó la intervención internacional para prevenir una mayor escalada del conflicto. El presidente francés, Emmanuel Macron, también condenó la acción israelí y anunció su intención de dialogar con el presidente estadounidense, Donald Trump, y con Netanyahu para abordar la situación.
Impacto en la población civil y situación humanitaria
El bombardeo en el barrio de Hadath, en los suburbios meridionales de Beirut, destruyó completamente un edificio y desató el pánico entre los residentes, quienes temían una posible masacre. El caos se apoderó de la zona de Al Jamous, donde se registraron escenas de desesperación y huida masiva.
Estos eventos subrayan la fragilidad del alto el fuego y la tensa calma que ha prevalecido en la región desde noviembre. La comunidad internacional observa con preocupación el deterioro de la situación y la posibilidad de un retorno a un conflicto a gran escala.
Mientras tanto, en Jerusalén, miles de musulmanes se congregaron en la Explanada de las Mezquitas para las oraciones del viernes durante el Ramadán, en medio de un fuerte despliegue de seguridad. La situación en la región sigue siendo volátil, con múltiples frentes de tensión que amenazan la estabilidad y la paz en Oriente Próximo.